La higiene bucal y la primera consulta odontológica del bebé
Página 1 de 1.
La higiene bucal y la primera consulta odontológica del bebé
¿Cuándo comenzar con la higiene bucal y la consulta odontológica?
Es frecuente que en la consulta odontológica los padres pregunten cuál es la edad ideal para que su pequeño concurra por primera vez al odontólogo, como también cuál es la edad aconsejada para comenzar con su higiene bucal. En realidad, esto dependerá del desarrollo del niño. No obstante es recomendable que concurra al odontólogo por primera vez al menos luego de la aparición de la dentición, es decir entre los 24 y los 36 meses.
Con respecto a su higiene dental es importante que la realices tú desde que comienza la dentición, es decir aproxiamdamente a los 6 meses de vida.
¿Cómo comenzar?
A continuación te damos algunos consejos para tener en cuenta a modo orientativo:
• Iniciación del cepillado
Comienza con su higiene bucal desde temprano, es decir desde la aparición del primer diente, hasta que desarrolle la destreza necesaria para llevar por sí solo el cepillo a su boca. Es importante que sea desarrollado desde el comienzo ya que de este modo este juego va a ir conviertiéndose de a poco en un hábito para el bebé
• Fomentando el hábito de la limpieza
Debes recurrir a todos los medios para llamar su atención y despertar su interés. En esta primera etapa no se busca la excelencia en la higiene sino formar el hábito para que perdure toda su vida. El juego y la estimulación es la clave. Un cepillo o varios de diversos colores y de diseño atractivo ayudarán para lograr la motivación deseada. Existen varios productos disponibles que te pueden ayudar para ello, desde mordillos con cerdas suaves hasta cepillos que permiten que los insertes en tu dedo y que limpies los dientes de tu bebé con la punta cerdada. Invítalo a que elija cuál es el cepillo que le gusta más antes de comenzar.
• Técnica de cepillado
Limpia dos veces por día sus dientes en todas sus caras como también las encías. Hazlo suavemente y sin presionar demasiado, ya que podrías lastimarlo.
• Pastas dentales
Es recomendable que las pastas dentales que utilices sean de sabores agradables durante esta primera etapa. Existe una gran cantidad de productos en el mercado especialemente elaborados para esta etapa. Comienza con la que tu crees que pueda gustarle y ante su rechazo reiterado cambia de sabor o marca.
• Supervisando su técnica de cepillado
Si ya puede cepillarse solo, supervisa periódicamente su técnica, tratando de que repase todas las caras de sus piezas dentales. De este modo estás incorporando una técnica metódica en su higiene. También asegúrate que tu hijo pueda verse en un espejo mientras se cepilla los dientes como también genera una rutina diaria luego de cada comida.
• Visita al odontólogo
Es ideal que comiences con las correspondientes visitas al odontólogo luego de la dentición, ya que de este modo obtendrás un beneficio doble: un chequeo del estado de sus piezas dentales y de sus tejidos blandos, como así también los recomendados baños de flúor (topicaciones) que son ideales para conferirle salud a sus dientes. Las consecutivas visitas para los baños de flúor no sólo aseguran un buen estado de salud bucal, sino que además, al no ser traumáticas, establecen un vínculo sano con el odontólogo, con quien comenzarán a relacionarse desde la prevención y no desde la patología y el dolor.
Es frecuente que en la consulta odontológica los padres pregunten cuál es la edad ideal para que su pequeño concurra por primera vez al odontólogo, como también cuál es la edad aconsejada para comenzar con su higiene bucal. En realidad, esto dependerá del desarrollo del niño. No obstante es recomendable que concurra al odontólogo por primera vez al menos luego de la aparición de la dentición, es decir entre los 24 y los 36 meses.
Con respecto a su higiene dental es importante que la realices tú desde que comienza la dentición, es decir aproxiamdamente a los 6 meses de vida.
¿Cómo comenzar?
A continuación te damos algunos consejos para tener en cuenta a modo orientativo:
• Iniciación del cepillado
Comienza con su higiene bucal desde temprano, es decir desde la aparición del primer diente, hasta que desarrolle la destreza necesaria para llevar por sí solo el cepillo a su boca. Es importante que sea desarrollado desde el comienzo ya que de este modo este juego va a ir conviertiéndose de a poco en un hábito para el bebé
• Fomentando el hábito de la limpieza
Debes recurrir a todos los medios para llamar su atención y despertar su interés. En esta primera etapa no se busca la excelencia en la higiene sino formar el hábito para que perdure toda su vida. El juego y la estimulación es la clave. Un cepillo o varios de diversos colores y de diseño atractivo ayudarán para lograr la motivación deseada. Existen varios productos disponibles que te pueden ayudar para ello, desde mordillos con cerdas suaves hasta cepillos que permiten que los insertes en tu dedo y que limpies los dientes de tu bebé con la punta cerdada. Invítalo a que elija cuál es el cepillo que le gusta más antes de comenzar.
• Técnica de cepillado
Limpia dos veces por día sus dientes en todas sus caras como también las encías. Hazlo suavemente y sin presionar demasiado, ya que podrías lastimarlo.
• Pastas dentales
Es recomendable que las pastas dentales que utilices sean de sabores agradables durante esta primera etapa. Existe una gran cantidad de productos en el mercado especialemente elaborados para esta etapa. Comienza con la que tu crees que pueda gustarle y ante su rechazo reiterado cambia de sabor o marca.
• Supervisando su técnica de cepillado
Si ya puede cepillarse solo, supervisa periódicamente su técnica, tratando de que repase todas las caras de sus piezas dentales. De este modo estás incorporando una técnica metódica en su higiene. También asegúrate que tu hijo pueda verse en un espejo mientras se cepilla los dientes como también genera una rutina diaria luego de cada comida.
• Visita al odontólogo
Es ideal que comiences con las correspondientes visitas al odontólogo luego de la dentición, ya que de este modo obtendrás un beneficio doble: un chequeo del estado de sus piezas dentales y de sus tejidos blandos, como así también los recomendados baños de flúor (topicaciones) que son ideales para conferirle salud a sus dientes. Las consecutivas visitas para los baños de flúor no sólo aseguran un buen estado de salud bucal, sino que además, al no ser traumáticas, establecen un vínculo sano con el odontólogo, con quien comenzarán a relacionarse desde la prevención y no desde la patología y el dolor.
Temas similares
» La higiene del hogar y el bebé
» La primera semana de vida del bebé
» La primera dentición
» La mascota y el bebé
» ¿Por qué llora mi bebe?
» La primera semana de vida del bebé
» La primera dentición
» La mascota y el bebé
» ¿Por qué llora mi bebe?
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.